La distribución de los árboles se realizó utilizando un indicador compuesto basado en índices de cobertura vegetal, temperatura superficial y vulnerabilidad social de cada una de las comunas de la Región Metropolitana. Este indicador determinó la disponibilidad de árboles a repartir por comuna, tanto a personas naturales (ciudadanía) como a organizaciones comunitarias.

El objetivo de este indicador es priorizar las comunas que tienen mayor requerimiento de arbolado y lograr el principio de equidad territorial.

La postulación se realizó a través de un formulario que los interesados debieron completar en la página web del Gobierno de Santiago. Hubo comunas en que las postulaciones fueron menores a los cupos disponibles y otras que la excedieron. En el segundo caso, la asignación se hizo por orden de postulación.

En el caso de comunas que quedaron con cupos disponibles, estos se redistribuyeron en aquellas con mayor demanda, siguiendo el orden de priorización dada por el indicador establecido. Este sistema busca dar cobertura y respuesta a la mayor cantidad de organizaciones que se han interesado activamente en el programa.